Saltar al contenido

Piel

El aspecto de nuestra piel es clave para sentirnos y mostrarnos más guapos, por lo que te presentamos los mejores trucos caseros para la piel que hemos recopilado:

Nuestro cuerpo expulsa a través de la piel una gran cantidad de materias de desecho. A esto hay que añadirle las secreciones producidas por las glándulas sudoríparas y sebáceas. Con excepción del agua que se evapora, el resto de dichas materias se deposita en la piel, almacenándose si no se lleva a cabo una higiene completamente necesaria. Para contrarrestar estos mecanismos te hemos recopilado buena información y trucos caseros para la piel.

Pero además, a lo largo del día estamos en contacto con cientos de partículas nocivas para nuestra piel, como por ejemplo los humos desprendidos por los coches y la propia contaminación, las chimeneas de las casas, la nicotina del tabaco, la lluvia que cae contaminada o la sequedad medioambiental.

limpiarse la cara1. Limpieza de la piel

La higiene de nuestra piel es una práctica diaria indispensable para la buena salud de la piel. Para ello utilizaremos productos específicos destinados para este menester.

Los productos de limpieza de la piel han de reunir una serie de cualidades para que no resulten agresivos y, de esta manera, evitar un posible desequilibrio del pH natural. La elección del producto adecuado puede convertirse en una ardua tarea: leches limpiadoras, jabones, aceites desmaquillantes o toallitas desmaquilladoras invaden las estanterías de centros de belleza, perfumerías, farmacias y hasta supermercados. Por otro lado, está la opción de hacer en casa tu cosmética natural utilizando los trucos de belleza contenidos aquí en Entorno-Natura.com

Leches limpiadoras

limpiar la caraLas leches limpiadoras son las más conocidas, y utilizadas, de los desmaquilladores que puedes encontrar. Se trata de emulsiones fluidas que se aplican sobre el rostro masajeando suavemente allí donde suelen acumularse más restos de suciedad., como son la aletas de la nariz y las zonas que circundan ésta.

Acto seguido, se retira el producto con una esponjita suave, o un disco desmaquillador, previamente humedecido en agua. Las esponjas de origen natural son muy apropiadas para la limpieza de la cara por su gran suavidad.

Aceites desmaquilladores

Los aceites desmaquilladores suelen ser de origen vegetal. Se aplican de igual manera que las leches limpiadoras. Generalmente, están más indicados en pieles secas o maduras, siempre dependiendo de su composición.

Panes desmaquilladores

Las pastillas, conocidas como pains o panes desmaquilladores, tienen la apariencia de una pastilla de jabón, pero producen menos espuma. Su composición es diferente, y no suelen contener productos abrasivos que alteren el manto hidrolipídico natural.

Son muy propias para pieles sensibles, intolerantes y frágiles, especialmente las que están compuestas a base de algas. Personalmente, se aconseja tener una jabonera destinada a su uso, ya que su elevado precio, comparado con el de una pastilla de jabón normal, nos obliga a utilizarlas solamente a la hora del desmaquillado.

Toallitas desmaquilladoras

Las toallitas desmaquilladoras son realmente muy cómodas para llevar en los viajes por el poco espacio que ocupan.

Los geles y espumas desmaquilladoras completan la amplia variedad de texturas que podrás encontrar en las tiendas para cuidar y limpiar tu piel.

desmaquillarseCómo desmaquillarse

A la hora del desmaquillado, no puedes olvidar que el contorno de los ojos, por ser una zona extremadamente sensible y vulnerable, debe tener un tratamiento específico.

Los desmaquilladores de ojos poseen un pH muy similar al de las lágrimas, y por tanto no irritan los ojos. No obstante, es conveniente tener precaución a la hora de aplicarlos, e intentar que no se introduzca nada en ellos.

Para evitar las temidas ‘patas de gallo’, o arrugas del contorno de los ojos, debes procurar no desplazar de un lado para otro la delicada piel del contorno orbicular. Los movimientos han de ser extremadamente suaves y lentos. No por hacer más presión vamos a dejar la piel más limpia. Hay que tener presente que el contorno de ojos es la zona más delicada del rostro, y por ello es la primera que comienza a envejecer.

Después del maquillado es conveniente secar la piel con una toalla suave, fina y, preferiblemente, que no contenga fibras artificiales; el algodón resulta muy absorbente y apropiado para ello. Efectúa ligeros toques continuados con la yema de los dedos, pero, eso sí, siempre sin frotar ni desplazar la piel de un lado para el otro.

Una norma básica es que debes desmaquillarte a diario. La suciedad en la superficie cutánea, además de producir efectos ópticos antiestéticos, facilita el desarrollo de microorganismos y puede originar problemas dermatológicos.

Un error muy común es acostarse sin haber limpiado el maquillaje de todo el día. Algunas mujeres cometen el doble error y la imprudencia de aplicarse su crema de tratamiento sobre los restos de maquillaje, con lo cual se forma una pasta nada saludable y muy propicia para crear algún tipo de problema en la piel.

  • Si eres de las que te maquillas a diario, y no hay manera de convencerte de que elimines estos restos de tu rostro, hazte un favor: lávate la cara con agua fresca antes de aplicar cualquier producto de tratamiento.

Otro error menos extendido es la creencia de que la leche limpiadora se puede dejar aplicada como crema de tratamiento. Nada más lejos de la realidad: siempre es necesario retirarla del rostro; no por tenerla más tiempoaplciada va a ejercer una limpieza más profunda, el efecto puede resultar totalmente nefasto para la salud de la piel.

☝Finalmente, recuerda el 1,2 y 3: primero los ojos, segundo la boca y el rostro después.☝

La limpieza de la piel es imprescindible para mantener la piel saludable; sin embargo, elimina aceites naturales y el manto hidrolipídico protector; por tanto, una buena limpieza siempre ha de ir seguida de una buena hidratación y nutrición para reponer los alimentos perdidos.

2. Hidratar la piel

Hidratarse siempre, más si vas a exponer tu piel a los rayos del sol, pues nuestro cuerpo pierde mucha agua, ya sea a causa de la sudoración o por evaporación. Para restituir esa pérdida necesitamos hacerlo de dos modos: mediante la cosmética, usando cremas hidratantes y nutritivas que compensen la sequedad que nos causa el sol; y a través de la dieta, consumiendo alimentos frescos y ricos en agua: fruta y verdura con alto contenido hídrico o ingiriendo zumos y bebidas naturales, batidos caseros, infusiones frías y, por supuesto, agua, que es la mejor bebida que podemos tomar.

Cremas con ácido hialurónico

Hidrata en profundidad la piel, en especial la del cutis, con una crema rica en ácido hialurónico, que es una sustancia de nuestro cuerpo que perdemos con la edad y que facilita la regeneración celular.

Plantas para la piel

La piel se protege del exterior y en ella se sintetiza la vitamina D. Mantenerla sana con estas plantas es muy fácil y una cuestión de puro hábito:

  • Hamamelis. Cuida la piel por sus propiedades venotónicas. Se utiliza en caso de piernas pesadas, varices o hemorroides. En uso externo se utiliza en lesiones de la piel así como en cosmética.
  • Salvia. Desintoxica y regula la sudoración. Bebe 3 vasos al día de la decocción (10g/vaso) para purificar la piel. Si estás embarazada toma precauciones con esta planta, consulta a tu naturópata.
  • Centella asiática. Activa la circulación y fortalece las fibras de colágeno, lo que evita el envejecimiento de la piel. Se toma en cápsulas o en líquido de 250 a 1000 mg al día.
  • Caléndula. La flor de la caléndula es rica en luteína y zeaxantina, unos pigmentos naturales que protegen la retina y la piel. Para realzar el bronceado sin dañar la piel tómala en infusión de 1 a 3 veces al día.

Suplementos

Cuantos más antioxidantes, más protección. Pepino, col kale, espinacas, perejil,… te aportan una dosis extra de sustancias antioxidantes, desintoxicantes y depurativas que devuelven la luz a tu piel tras un día de sol.

  • Vitamina C. Contrarresta los efectos nocivos de los rayos del sol. Incluye 5 raciones al día de frutas y verduras ricas en ella (kiwi, guayaba, tomate, pimiento verde, perejil,…)
  • Vitamina E. Nutre la piel desde dentro. Cubre tus necesidades diarias con el aceite de oliva, el aguacate y los frutos secos, especialmente las almendras.
  • Betacaroteno. Esta sustancia se obtiene de comer frutas y hortalizas anaranjadas y verduras de hoja verde.

Piel sensible al sol

Teniendo en cuenta los distintos tipos de piel que tengamos, de media sólo podemos exponernos al sol 10 minutos sin perjudicar nuestra dermis. Es por ello, que debes protegerte tanto al ir a la piscina como a la montaña, incluso sólo si vas a salir a la calle. La protección ideal será aplicar crema solar protectora con un factor de protección alto (30-50), cada 2 horas y con la piel seca.

Las pieles sensibles al sol deben extremar sus precauciones, pues la piel sensible no se encuentra habituada a la fuerza de los rayos solares y necesita una gradual adaptación. Si este es tu caso, se recomienda:

  • Comenzar a tomar el sol poco a poco, utilizando un protector solar de al menos 30.
  • Para la cara, utiliza una crema hidratante con caroteno con filtros ultravioletas A + B, los hay basados en el caroteno de la zanahoria y que incluye germen de trigo, rico en vitamine E, potente antioxidante para prevenir arrugas.

Consejos para cuidar tu piel

  • Mejor una ducha que un baño caliente. Los baños que se demoran y con agua muy caliente favorecen la dermatitis atópica. Elige mejor una ducha que un baño y no más de una vez al día, con agua templada y un gel de pH neutro. Tras la ducha aplícate una buena loción hidratante corporal.
  • Evita el contraste de temperatura. El ambiente determina mucho la afecciones de piel atópica; intenta evitar los cambios bruscos de temperatura, moderando la calefacción en invierno y el aire acondicionado en verano. Los ambientes secos son perjudiciales para la piel, para ello puedes emplear humificadores, en nuestra tienda encontrarás los mejores del año.
  • Ropa de algodón, o tejidos naturales. Las lanas y fibras sintéticas aumentan los brotes de dermatitits y lesiones cutáneas. Vístete con prendas de 100% algodón, sobre todo en la ropa interior que está más en contacto con la piel.
  • Si sales a caminar escoge una loción protectora invisible resistente al sudor. Debes aplicarla 30 minutos antes de iniciar la actividad y reponerla cada 2 horas. Y no te olvides de llevar tus gafas de sol y una gorra.
  • Existen cremas específicas para los pies que te ayudaran a lucirlos hidratados y sin durezas. Fíjate que lleven compuestos que facilitan la renovación celular, como la urea y el ácidoglicólico.

Eccemas de repetición

El eccema es la inflamación de la piel acompañada de picor, se manifiesta especialmente en la cara, las muñecas, la parte interior de los codos y las rodillas. En general, para mejorarlo es aconsejable:

  • Tomar un suplemento de aceite de prímula o primrose.
  • Aumentar el consumo de alimentos ricos en vitamina A, bioflavonoides y cinc.
  • Utilizar sólo jabones suaves manteniendo la zona limpia y seca.
  • Evitar el contacto de la zona con agentes irritantes, como la lana o la montura metálica de las gafas.
  • Para aliviarlo realizar aplicaciones tópicas con preparados que incluyan regaliz o manzanilla.

La piel de los bebés

El cuidado y la higiene de los niños requieren mucha atención, nada es más delicado que la pie de los más pequeños. Su piel es frágil y delicada, la epidermis es una zona de intercambio con el exterior y una barrera a los ataques de gérmenes.

En los recién nacidos se comenzará con el baño tras la caída del cordón umbilical. Haz una emulsión con el jabón infantil y un poco de agua y lava con ella todo su cuerpo, desde la cabeza a los pies. Lo más higiénico es que utilices tu propia mano para esta operación: los guantes y esponjas pueden terminar por convertirse en un foco de gérmenes.

Es recomendable que le realices un masaje por todo su cuerpo con un aceite de almendras dulces natural. Para secarlo, envuélvelo con la toalla sin frotar.

Para mantener seca la zona del pañal y otras áreas de pliegues, sécalas con una toalla pequeña aparte y espolvoréalas con un poco de arcilla blanca.

Contorno de ojos sensible

La zona ocular es efectivamente muy sensible y delicada. Esto se debe a la finura de la piel que lo conforma y, porque está cerca del ojo y puede sufrir posibles irritaciones por los vapores desprendidos de los aceites o perfumes contenidos en los productos cosméticos como pueden ser la crema hidratante facial, los champús, maquillajes, sombras de ojos, rímel, etc.

Independientemente de las cremas que se hayan probado, puede ser que no te haya ido bien con ellas porque alguno de los productos que uses con regularidad te esté perjudicando y te sensibilice más si cabe aún.

La mejor recomendación para los ojos sensibles es utilizar una crema que no contenga perfumes químicos y que sea rica en sustancias hidratantes y regeneradoras como el áloe vera, la vitamina E y el panthenol.

Consejo para ojos sensibles

Cuando la zona es extremadamente sensible, hay que aplicar la crema sobre todo allí donde más tarde puedan aparecer las patas de gallo dejando libre el párpado inferior. De esta manera, los vapores que puedan desprenderse del producto no se introducirán en el ojo.

Si la irritación ya se ha producido, lo mejor es lavarse los ojos con una infusión a temperatura ambiente de eufrasia. Notarás un alivio inmediato